¿La orientación sexual se puede escoger?

lesbianas

Hola, y hoy vamos a por fin revelar uno de los misterios de la ciencia más importantes del último siglo. ¿La orientación sexual se puede escoger?

Muchas de las personas que se oponen al matrimonio homosexual o la adopción por parejas homoparentales, insisten, insisten e insisten en que la orientación sexual es una elección, y que las personas homosexuales eligen ser homosexuales porque están enfermas y tienen problemas mentales.

He descubierto que de hecho no Que la orientación sexual no es algo que se escoge ¿Cómo lo descubrí? Me di cuenta de una cosa Muchísimas mujeres, incluida yo, daríamos lo que fuera por ser lesbianas. Lo que no daría porque no me gustara la macana. ¿Crees que chupo pitos por gusto? ¿Porque sabe rico? ¿Porque se la van muy bien? No señor, porque por más que yo quisiera tragar papaya, siempre acabó encima de una banana.

Qué no daría yo por estar con alguien que sabe dónde está el clítoris, y cuando lo encuentra, sabe qué hacer con él. Coño, que no daría yo por estar con una persona que no basa todas sus expectativas sexuales en el porno español gratis. Que no daría yo por estar con una chava que así como exige sexo oral, lo da. Que no daría yo por estar con alguien que sabe que un buen sexo no es nomás tener el pito parado 45 minutos y meterla y sacarla repetidamente y no hacer absolutamente nada pinches más Pero no, me jodo. Y te aseguró: no soy la única.

Habemos tantas pero tantas que ya estamos hasta la coronilla de los hombres Y nos siguen gustando Estamos hartas de esos güeyes que quieren que les chupes el pito y además los huevos, además que les hagas una rusa y además anal y además ¡ahogarte! ¿Qué pedo con los hombres?

Tanta porno ya les dañó el cerebro y de verdad piensan que meterte el pito sin tu consentimiento hasta el fondo de la garganta, hasta que te ahogas, y te salen lágrimas, y quieres vomitar y hasta te pinches duele, creen que eso es sexy. ¿Qué madres les pasa en la cabeza?

Free Porn XNXX

¿Crees que me ligo a güeyes así porque me gusta? Si fuera yo lesbiana no tendría que enfrentarme a esas pendejadas Y ya los estoy viendo «Ay pinche feminazi odias a los hombres» ¿Qué no escuchas idiota? Estoy diciendo lo contrario ¡Ah! Es que esa es la otra Pinches hombres que no escuchan.

Las mujeres llevamos años diciendo: Es que nos acosan. Es que nos acosan. Es que nos acosan. Es que nos acosan De repente, se hace un efecto dominó donde varias mujeres se atreven a denunciar a sus acosadores, a sus agresores, a sus violadores. ¿Y sabes que hicieron los hombres? Ay, ahora resulta que a todas las acosan Si, pendejo. Llevamos años diciéndote ¿qué no escuchas?

¿Tú crees que nos ligamos a batos que ni siquiera nos escuchan, que ni siquiera nos dan buen sexo oral, ni siquiera nos tocan bien el chocho porque queremos? No, lo hacemos porque nuestra cabecita en lugar de estar cante y cante Papaya, Papaya, Papaya, Papaya, Papaya, Papaya Está cante y cante Camote, Camote, Camote, Camote, Camote, Camote, Camote, Camote ¡Joder! Pero tan no nos oyen que es común entre las mujeres burlarnos de lo malo que son para coger, de lo mal novios que son porque precisamente no oyen No ponen atención, no valoran lo que sentimos y lo que pensamos.

¿No has visto todas esas imágenes que se burlan como las mujeres la armamos de pedo por todo y nos enojamos por todo? Porque en su visión del mundo si algo nos hace enojar a nosotras pero a ellos no, pues es que las que estamos mal somos nosotras. Pero vaya, no me creas a mi pinche misándrica feminista ¿no?

Pregúntale a tu hermana, a tus primas, a tu mamá, a tus amigas, a una extraña en la calle Oye ¿es verdad eso de que la mayoría de los hombres no son buenas escuchando? ¿Que la mayoría de los hombres son bien malos para el sexo? Y si, mijo, te vas a sorprender cuántas te van a decir que si Tu nomás piensa.

¿Cuántas veces el sexo acabó en el instante mismo en que tú eyaculaste y ni siquiera te importó si la chava había acabado o no? Para la mayoría de los hombres el fin único del sexo es que tú eyacules Si la mujer tiene un orgasmo o no, pues es un bonus Pero no es obligatorio Si, a veces no puedes acabar Pero ¿quieres saber cuántos batos me han preguntado: «qué quieres intentar; quieres acabar; te ayudó en algo»? Casi nadie mijo Pero por el contrario, si ellos no acabaron y yo ya me cansé, o ya acabé o ya hasta me duele Me exigen, no me piden.

tattooed milf

O mamada, o jalada y hasta pinche anal Que cabroncitos ¿no? Pero es que para ellos después de años y años de ver enfermo y pinche rarísimo porno Creen que así es: ni preguntan, que ni hablan. Que nomás te lastiman porque quieren. Y coño, no tengo nada en contra de las ahorcadas y de las nalgadas Que hasta me gustan Solo digo que pinches batos mecos Ni preguntan ¿Tú crees que me aguanto esas jaladas porque me gustan? No, lo hago porque no puedo ser lesbiana!

Maldita sea Una vez estuve con un bato todo meco, que me duró como dos minutos Que me exigió que le chupara el pito Pero cuando yo le dije «Oye, pues faltó yo» ¿sabes que me respondío el cabrón? Yo no masturbo ni hago oral.

A ver cabrón Me exigiste que te la chupara. Me duraste dos minutos Y me sales con la mamada de que a ti no te gusta ni el juego previo ni toquetear ni lamer Pos oye, no cojas Ninguna morra se merece ese castigo. Y vaya a lo mejor este chico si es la máxima expresión del hombre empoderado que cree que el sexo tiene que ser como a él le gusta y tiene que durar lo que él dura.

Pero eso no quita que es la regla más generalizada Así que por favor la próxima vez que quieras venir a decir que los homosexuales lo son porque quieren Acuérdate de mí, acuérdate de todas las pinches morras que han recibió fotos de pitos que ni pidieron Que desearían tanto ser lesbianas Acuérdate todas las morras frustradas sexualmente porque la mayoría de los hombres ni le saben al juego previo ni le saben al cunnilingus ni le saben a la dedeada.

Me jodo ¿cuál es la solución a este problema? Pues son dos Una: amiguito, bato heterosexual macho de pecho peludo y masculinidad tóxica y frágil por lo que más quieras escucha a las mujeres Ponles pinche atención Es importante también que escuches sus problemas, que si algo le molesta Que si algo la pone triste, la escuches Y lo resuelvan No se pongan en su plan «Ay, está en sus diás, ay pinche histérica» No coño Que también tenemos nuestras razones para sentir lo que sentimos y es válido lo que sentimos Carajo, escuchanos, escuchanos, ¡puta madre! Pregunta. Se vale preguntar Se vale no saber.

Entiende que el sexo no gira en torno a tu pito Cuando ya haya confianza y cuando ya estén claros los parámetros de gusto entre tú y ella Pos chingalé. Pero en el inter: no mames cabrón Y la otra solución Dejen de joder a los homosexuales. Que la orientación sexual no se elige La heterosexualidad no es una obligación, no es el estándar de oro de la salud mental y no es lo mejor que te puede pasar Las personas que te gustan, que te enamoran, que te excitan, no es algo que se escoge Porque si yo pudiera escoger… pos ya sabes Ni modo, me quedo con lo que hay Paz. Respeto. Amor. Perdón.

Mis zonas erógenas secretas

Mis zonas erógenas secretas

¿Sabías que tu piel es tu mayor zona erógena? Tiene miles de terminaciones nerviosas, pero algunas zonas son más sensibles que otras. Así que te mostraré las partes más sensibles de tu cuerpo.

Desde una vista tántrica, cada parte del cuerpo tiene una conexión con un centro de energía. Y cuanto más actives cada centro de energía, más intenso será tu amor y tus orgasmos. Así que… empezamos con la cabeza… Tu cuero cabelludo está cubierto con millones de terminaciones nerviosas. Masajéalo suavemente y también juega con el cabello.. Esto no sólo libera la tensión, sino que también aumenta el flujo de sangre que inunda tu cuerpo con las hormonas de la dopamina y la serotonina. Ahora pasamos a los lóbulos de las orejas. Besa primero el izquierdo y luego el derecho… Para una mujer el hormigueo irá directamente al útero y estimulará el primer chakra. Luego, por supuesto, la nuca. Este toque activará el tercer chakra.

Otro punto sensible es la unión sacro-lumbar en la base de la columna vertebral. Hay nervios en la columna que están conectados directamente a los genitales. Por lo tanto este toque puede abrir el 1er y 2do chakra. Ahora aquí hay otro punto secreto: el pliegue glúteo. Tócalo con la lengua o con el dedo. Abrirá el primer chakra. Y un punto que personalmente me encanta es la parte interna de los muslos. Puedes acariciar muy ligeramente la parte interior de los muslos hacia los genitales y luego pasar a la parte posterior de las rodillas. La piel aquí es súper delgada y muy receptiva al tacto sensible.

Y ahora pasamos a un nivel diferente de zonas erógenas. Si acaricias suavemente el borde del dedo meñique o del pulgar puede provocar escalofríos en la columna vertebral de tu amante. Y las palmas de las manos son especialmente sensibles a los golpes circulares. Mhh y el ombligo… no te olvides del ombligo… Acariciarlo suavemente en el sentido de las agujas del reloj y también acariciar un poco por debajo del ombligo. Tocar esta área abrirá el tercer chakra. Y bueno, nunca olvides jugar con los pies de tu amante. De hecho, la antigua práctica de la reflexología indica que ciertos puntos de presión en los pies pueden desencadenar una intensa excitación sexual.

Y tampoco olvidemos la areola anal. Si la naturaleza no quisiera que jugáramos con esta área, no tendría tantas neuronas. Así que inténtalo. Golpee ligeramente en el borde exterior. Esto da una conexión directa con el primer chakra. Así que … ahí lo tienes. Espero que hayas disfrutado de este pequeño artículo mío… Y no te olvides … todo el mundo es diferente. A nadie le gusta lo mismo. Así que ve a explorar … con una mente y un corazón abiertos.

Me conocéis por mi carrera en el mundo del porno – cómo y porqué entré en ese mundo (Amarna Miller)

Amarna Miller Me conocéis por mi carrera en el mundo del porno

El mundo del porno

Hola a todos, soy Amarna Miller. Me conocéis por mi carrera en el mundo del porno, cómo y porqué entré en ese mundo.

Pero antes quiero haceros un resumen de cómo era mi vida en ese momento. Vivía en Madrid, España, estaba a punto de entrar en la universidad y no era una mala estudiante, pero me sentía muy frustrada. No podía encontrar nada que me apasionase, no me sentía apreciada… y me sentía muy fuera de lugar. La mayor parte del tiempo al menos. Me encanta leer pero apenas tenía amigos.

Los días pasaban casi como fotocopias, uno detrás de otro. Igual que mucha gente de mi generación, no sabía qué hacer con mi vida y me sentía bastante triste. Mi novio por aquellas era fotógrafo y empezó a sacarme fotos. En ese punto de mi vida no me sentía bien con mi cuerpo ni con mi imagen, no tenía nada de autoestima, pero ver las fotos que él sacaba de mí, me hacía muy feliz. Por primera vez en mi vida me sentí guapa, y decidí empezar a posar como modelo. Descubrí la fotografía y empecé a posar delante de las cámaras. Por aquellas tenía 18 años.

Para mí esto fue una revolución que cambió mi vida por completo. Posar como modelo me hizo darme cuenta de que hasta entonces había tenido una visión distorsionada de mí misma y me trajo la autoestima que me faltaba (hasta entonces). No era tímida y siempre he pensado que el cuerpo humano es algo agradable que no hay que esconder así que empecé a posar en sesiones de fotos de desnudo. Eso estuvo genial.

Me sentí reconciliada con mi imagen por primera vez y me sentí empoderada. Al mismo tiempo y en parte porque estaba empezando a superar mi falta de autoestima y otros problemas personales, empecé a sentirme mejor en el mundo del sexo. Me volví muy exhibicionista, me encantaba probar cosas nuevas en la cama e investigar sobre temas sexuales.

La idea de empezar a trabajar en algo relacionado con el sexo empezó a crecer en mi cabeza, como una persona muy sexual y con una libido muy alta, me gusta pensar en la necesidad como en fantasía. Como… ¿Qué pasaría si de repente me meto al mundo de porno?

¡Qué emocionante! La industría parecía algo muy distante e inalcanzable, pero empecé a investigar. Y descubrí varias productoras en mi país, en España. Así que les mandé algunos mensajes para ver qué condiciones podrían ofrecerme si empezase a hacer porno.

Por desgracia, no me gustaron sus respuestas, nadie me explicó realmente qué pasaría si empezase a hacer porno, así que la idea de trabajar en el porno simplemente desapareció de mi cabeza. Al mismo tiempo, en bellas artes, la carrera que hice en la universidad, tuve clases de fotografía por primera vez y me estaba encantando.

Me enseñaron cómo manejar el material de fotografía y me apasionó por completo. Después empecé a sacar fotos de mis amigos, al principio vestidos, luego desnudos, y como me interesaba mucho el tema de la sexualidad, se fueron volviendo más y más explícitas. Junto con otro amigo empezamos a fantasear sobre la idea de crear una productora porno, sobre lo guay que sería tener una página porno.

Yo quería fotografiar chicas gordas

Primero para ofrecer a las modelos lo que yo no encontré cuando me informé sobre la industria: claridad, respeto, confianza… Pero también para dar un cambio en las estéticas clásicas de la pornografía, que siempre representa el mismo tipo de belleza, el mismo tipo de cuerpo, y la misma estética, parecía bastante aburrido.

Yo quería fotografiar chicas gordas, y chicas con pelo en las axilas, y con pelo azul y con estrías. Y con cicatrices. Y con distintos estilos de ropa, y uñas distintas. Y… sí, no podía encontrar eso en la pornografía clásica, así que decidí hacerlo yo misma. Por aquel entonces, consumía bastante porno y la idea de unirme a la industria parecía más y más atractiva.

Mi amigo se fue del proyecto y cuando tenía 19 años, sólo 19 añitos, decidí crear Omnia-X, la compañía porno con la que empecé a grabar porno también como modelo. Teníamos cinco o seis modelos recurrentes y cada semana fotografiábamos con ellas. Primero empecé con fotos, luego probé el vídeo (y no tenía ni idea de cómo editar) pero poco a poco empecé a aprender más o menos todo lo que tenía que saber. No tenía nada de dinero, pero estaba invirtiendo en la empresa cada céntimo que estaba ganando posando como modelo. Y de repente descubrí que tenía un sueño: Representar sexualidad de una forma distinta, cuestionándome la hegemonía en el porno.

No tenía ni idea de qué estaba haciendo, no tenía experiencia, no tenía recursos, y aprender era muy lento. pero siempre pensé que si tenía que fracasar con una empresa, mejor hacerlo pronto y aprender de ello. Así que estábamos grabando al modo de guerrilla, con mucha pasión, pero no tantos recursos.

Y ese es el trasfondo, así es como empecé a grabar porno dentro de mi propia productora. Primero fotos, luego vídeo, primero en solitario, haciendo sólo vídeos de masturbación y después empecé a grabar con chicas y muy despacio, y siempre escuchando a mi propio cuerpo y sin forzarme a hacer nada de lo que no estuviese segura al 100% de querer hacer. Y no estaba sacando nada de dinero de ello. Porque era mi empresa, no me estaba pagando a mí misma.

Como al cabo de un año, una empresa llamada Abby Winters me contactó para saber si quería trabajar para ellos. Por aquel entonces, yo estaba en los circuitos amateur y ni siquiera me consideraba a mí misma «actriz porno». Definitivamente no una «estrella porno». Me sentía como una chica cualquiera masturbándose delante de la cámara. Ví su web y vi su contenido y me enamoró por completo. Dije que sí y me llevaron a Amsterdam para grabar cuatro escenas.

Fue increíble, me lo pasé genial. Y aún los aprecio un montón porque de verdad me dieron el espacio que necesitaba para hacer lo que quería delante de las cámaras, sin forzarme a hacer nada ni presionarme para nada. Con ellos seguí haciendo escenas individuales y con el tiempo escenas lésbicas, pero sobre todo creo que perdí el miedo a grabar para terceras personas. La principal razón por la que me metí en el porno fue porque quería explorar mi sexualidad, quería probar cosas nuevas.

Desde pequeña siempre me educaron en la idea de que el sexo era tabú, de que era algo privado, algo que sólo podía disfrutar en mi habitación y sin hablar de ello. Pero gracias a experimentar con el porno, me di cuenta de que disfrutaba muchísimo de mostrar mi sexualidad y diría que esto es casi terapéutico.

Gracias a esta empresa australiana me di cuenta de que hasta entonces lo había estado haciendo mal. Había estado buscando empresas en España, pero tenía que buscar productoras fuera de mi país. Con esta idea en mente, empecé a contactar a más compañías y empecé a grabar para otras productoras. Y ese fue el momento en el que empecé a ganar dinero con ello.

Invertí el dinero que estaba ganando como actriz porno en mi compañía y por fin empezamos a hacer las cosas bien. Comprar equipamiento, alquilar ubicaciones, fue un cambio enorme. Como yo no quería grabar porno en España, utilizaba los fines de semana y mis vacaciones de la universidad para viajar alrededor de Europa, grabando con distintas productoras.

Fuimos a Budapest, que es la capital europea de la pornografía

Decidí empezar a grabar escenas heterosexuales después de haber estado haciendo porno durante tres años más o menos. Mi mejor amiga (Amber Nevada) y yo, que también es actriz porno, y a quien conocí a través de Omnia-X, de mi empresa. Fuimos a Budapest, que es la capital europea de la pornografía y nos lo pasamos genial.

Éramos ella y yo contra el universo, haciendo lo que queríamos hacer. Ahí fue cuando dejé el circuito alternativo y empecé a rodar porno mainstream. Entonces descubrí que la industria también tiene sus partes malas y empecé a darme cuenta de que el porno tiene una cara más oscura que no había experimentado antes.

Pero para esos que no tenéis ni idea de mi carrera, haré un pequeño resumen para contaros qué pasó después de todo esto. Al final, cerré mi productora en 2013, terminé la universidad, y me vine a los EEUU a trabajar.

Llevo en la industria del porno casi ocho años ahora y aunque creo que la industria tiene que cambiar muchas cosas, para convertirse en una industria ética y también para ofrecer condiciones de trabajo dignas. Personalmente, me siento orgullosa de ser actriz porno. Os prometo que haré más vídeos sobre mi experiencia en la industria, y también de las cosas que creo que el porno tiene que cambiar para convertirse en un mejor negocio.